Haschisch

 

José  Marti

 

Arabia: - tierra altiva

Sólo del sol y del harem cautiva

(...)

Un beso de mujer! - Yo lo he sabido

Es un muy dulce instante extra - vivido -

El árabe si llora,

Al fantástico haschisch consuelo implora.

El haschisch es la planta misteriosa,

Fantástica poetisa de la tierra:

Sabe las sombras de una noche hermosa

Y canta y pinta cuanto en ella encierra.

El ido trovador toma su lira:

El árabe indolente haschisch aspira

Y el árabe hace bien, porque esta planta

Se aspira, aroma, narcotiza, y canta.

Y el moro está dormido,

Y el haschisch va cantando,

Y el sueño va dejando,

Armonías celestes en su oído.

Muchos cielos ha el árabe, y en todos

En todos hay amor, - pues sin amores,

Qué azul diafanidad tuviera un cielo?

Qué espléndido color las tristes flores?

Y el buen haschisch lo sabe,

Y no entona jamás cántico grave.

Fiesta hace en le cerebro,

Despierta en él imágenes galanas;

El pinta de un arroyo el blando quiebro,

El conoce el cantar de las mañanas,

Y esta arábiga planta trovadora,

No gime, no entristece, nunca llora;

Sabe el misterio del azul del cielo,

Sabe el murmullo del inquieto río,

Sabe las estrellas y luz, sabe consuelo,

Sabe la eternidad, corazón mío!

(...)

Amor de mujer árabe! Despierta

Esta mi cárcel miserable muerta;

Tu frente por sobre mi frente loca:

Oh beso de mujer, llama a mi puerta!

Haschisch de mi dolor, ven a mi boca!

 

Publicado em: Revista Universal, Mexico, 1º de junho de 1875